Fiebre, Estado febril, embotamiento, mal estar general, sensación de que todo se mueve mucho más rápido y tú, lennnto.
Cambio de tiempo, noches de calor y frío, pillándote siempre sin manta, cuando más la necesitas.
Ojeras y no de esas de salir de fiesta, no.
Pero da igual, la fiebre la llevas dentro, dentro del calor inexplicable de la compañía, esa que eleva la fiebre hasta el infinito y más allá.